EUROPA
PRESS
6 febrero
2020
Las
5 principales ideas para una vida plena
La vida puede cambiarnos en un segundo.
Por ello, debemos intentar disfrutar de cada momento, intentar sacar jugo a
cada segundo del día. Cada nuevo día es una oportunidad para sonreír, para ser
felices, mejores personas, y en el fondo sentirnos realizados, tener una vida
plena.
No obstante, el día a día está lleno de baches que muchas
veces nos lo complican. El exceso de trabajo, el poco tiempo para nuestra
familia y amigos, o enfermedades horribles que nos rodean y otra serie de
dificultades que, poco a poco, van mermando nuestra autoestima y ganas de
disfrutar de las 24 horas del día.
En este sentido, el doctor Mario Alonso Puig, médico
especialista en Cirugía general y del Aparato digestivo, y Chairman
del Center for Health, Well-Being and Happiness del IE University, ha
escrito un libro, '365 ideas para una vida plena' (Espasa) en el que nos da las claves para que todos los días del año tengamos una
reflexión positiva que poner en práctica.
En una entrevista con Infosalus,
el también especialista formado en el Instituto Mente-Cuerpo de la Universidad
de Harvard (USA) defiende así que hay que intentar día a día construir lo
ordinario en extraordinario con el objetivo de tener una vida plena, y gozar de
buena salud. A su juicio, es esencial ver lo extraordinario en lo ordinario, es
decir, debemos afinar la mirada en nuestro día a día e ir más allá de lo
superficial.
"Es preciso hacerlo porque lo que pasa es muchas de las
cosas que aparentemente son obstáculos o inconvenientes activan en nosotros el
sistema nervioso simpático, la parte del sistema nervioso autónomo que se
dedica a protegernos frente a las amenazas. Cuando buscamos lo extraordinario
en lo ordinario se consigue un equilibrio entre el sistema nervioso simpático,
encargado de estar alerta frente a la amenaza, y el sistema nervioso
parasimpático, encargado de la salud de las células, de proteger tejidos para
que no se desgasten en exceso", explica.
Es más, el doctor Alonso Puig precisa que el sistema
nervioso simpático es un sistema que consume energía, mientras que el
parasimpático ahorra energía. "Si nosotros consumimos mucha energía con
constantes alertas, esto lo estamos quitando de otros procesos que tienen lugar
en el cuerpo, como la digestión, o el proceso inmune. Por eso una gestión
correcta de la energía favorece la salud", afirma este experto formado en
Harvard.
Por otra parte, señala que cuando el sistema nervioso
simpático está demasiado activo se produce un aumento en la producción de los
radicales libres, aquellos que lesionan las fibras de colágeno, y pueden
alterar las moléculas de ADN favoreciendo las mutaciones y también aceleran el
envejecimiento.
Igualmente, el doctor Alonso Puig menciona que científicamente
está comprobado que dos horas después de trabajo mental, de un periodo de
concentración intenso, habría que hacer una breve parada de unos minutos para
darnos una vuelta y estirarnos un poco. "Cuando no se hace y hay periodos
de recuperación entre picos de estrés, se acumula algo a nivel biológico que no
se sabe qué es, una sustancia química, una carga halostática,
que se va acumulando y se mantiene como una olla hirviendo. Cuando nos vamos de
vacaciones la olla explota y por eso muchas veces las personas se ponen
enfermas en vacaciones", señala este experto.
Con ello, recuerda este doctor que hay dos órganos en el
cuerpo que siempre necesitan descansar: los ojos y el cerebro. "Si
mantenemos a los ojos funcionando todo el rato en las pantallas estos empiezan
a funcionar peor y lo mismo pasa con el cerebro, que trabaja con tanta
intensidad que necesita una recuperación entre los picos de estrés",
subraya Alonso Puig.
Por eso defiende esta idea el doctor, si no intentamos ir
más allá, disfrutar de cada día, las cosas nos irán peor, gozaremos de peor
salud y no seremos tan felices. Con ello, y entre las 365 ideas que aporta en
su libro para una vida más plena y por tanto más feliz, las 5 que a su juicio
son las más importantes son:
1-
No poner tanta atención en el tener y sí en el ser.
2-
Atrevernos a salir de la zona de confort porque más allá de ella
es donde de verdad está la magia.
3-
Aprender a serenar la mente porque ésta si no está serena es causa
directa de enfermedad.
4-
Abrazar la diversidad, no sencillamente tolerarla.
5-
Vivir con un mayor nivel de gratitud.
Finalmente defiende que, antes de salir a la calle y de
encontrarnos con el nuevo día, hay que hacer una preparación mental para no
dejarnos distraer por cosas no importantes y saber desarrollar esta mirada no
profunda. "Si uno no se entrena es muy fácil que acontecimientos del día
arrastren de aquí para allá a uno", sentencia el doctor Mario Alonso Puig.